El agua es un elemento fundamental en la vida de cualquier ser humano. Desde que nacemos no podemos prescindir de ella ni un solo día, y es precisamente durante los primeros meses de vida cuando más agua ingerimos, aunque esta sea en forma de leche materna o artificial.
Nuestro organismo necesita sodio para funcionar correctamente. Muchas de las funciones de nuestro organismo son reguladas por la sal, pero abusar de ella puede traer consecuencias negativas a nuestra salud.
A la hora de iniciar una dieta se puede caer en el error de pensar que es necesario ingerir el menor número de alimentos posible y pocos líquidos. Pero esto sería tan equivocado como pensar que para adelgazar sólo debemos consumir agua en grandes cantidades.
